Dando continuidad a este curso que estamos realizando con jóvenes de
grupos y organizaciones de Masaya, Granada, Carazo, Rivas, Chinandega y León,
hicimos el tercer módulo, sobre comunicación y liderazgo, los días del 5 al 7
de Septiembre, en la Finca Las Delicias de El Crucero.
En este encuentro
participaron 48 jóvenes, 28 mujeres y 20 varones.
Durante este último módulo
identificamos factores que dificultan la comunicación, así como herramientas de
comunicación que facilitan el entendimiento y la construcción colectiva de
propuestas. Hicimos también un simulacro de Parlamento Juvenil Nicaragüense,
con el objetivo de ensayar la elección democrática de representantes, así como
el diálogo, el debate y la negociación respecto a los derechos y la convivencia
entre diversos grupos de jóvenes.
También, aprovechando que estábamos en la Finca Las Delicias, hicimos
una caminata por los senderos al Ojo de Agua. Los guía nos llevaron por largas
subidas y pendientes, con suelos montosos y fangosos, rodeados de plantas de
café, árboles frondosos, pájaros y monos; una desafiante caminata que puso a
prueba nuestra motivación y determinación, dos cualidades de liderazgo que sin
duda hay que seguir practicando.
Así evaluaron los y las participantes este encuentro:
“Aprendí a ser una persona con una comunicación activa, a escuchar más a
las personas y a ponernos en su lugar para comprenderla mejor. Aprendí a
reconocer cuáles son las limitaciones de la comunicación. Aprendí a ser más
tolerante con las personas que me rodean.”
“Aprendí a hablar más y expresar lo que siento. Aprendí que los líderes
no sólo mandan, sino que ayudan motivando; un líder no es una figura
autoritaria, es un amigo, un soporte, una incentivación. También aprendí que es
importante valorar los momentos con nuestros compañeros.”
“Aprendí a trabajar en equipo, a tener libertad de expresión, a
relacionarme con chicos y chicas que no comparten mi misma forma de pensar.
Aprendí nuevas dinámicas. A ser mejor líder. A escuchar. Conocí un nuevo lugar.
Hice amistad con nuevas personas.”
“Aprendí que todos tenemos cosas en común. Que los problemas que
surgieron (simulacro de parlamento) también surgen en la comunidad y
completamente similar, ni que ponerle ni que quitarle. Es difícil agregar algo
constructivo y es fácil llevar la contraria o no aceptar las ideas de otros.”